La guerra en Ucrania podría provocar una escasez de pan en varios países árabes , incluido Yemen, que estuvo plagado de guerra civil, donde millones aún corren el riesgo de morir de hambre.
Refiriéndose a un análisis del Middle East Institute (MEI), con sede en Washington, el portal recuerda que los países de Medio Oriente obtienen granos principalmente de Ucrania y Rusia, y la escasez de pan podría provocar protestas e inseguridad en la región. El instituto destacó que aproximadamente la mitad de las exportaciones de cereales de Ucrania van a la región del norte de África.
«Las dificultades de suministro en caso de guerra supondrían un duro golpe para los países importadores de alimentos como Egipto, Yemen, Libia y Líbano», dice el informe. Según un informe del Departamento de Agricultura de EE. UU. del año pasado, los estados de Medio Oriente han importado más de 36 millones de toneladas de granos, principalmente de Ucrania y Rusia. El informe también advirtió que estas importaciones aumentarán en Irán, Irak y Siria debido a la sequía y al aumento de las olas de calor.
David Beasley, director del Programa Mundial de Alimentos (PMA) de las Naciones Unidas, ya ha dicho que la guerra tendrá un «impacto dramático» en la región. Según WFP, unos 12,4 millones de personas solo en Siria, que pudo alimentar a la mayoría de sus ciudadanos antes de la guerra civil que comenzó en 2011, corren el riesgo de sufrir inseguridad alimentaria. El país importó 1,5 millones de toneladas de grano el año pasado, principalmente de Rusia.
